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martes, 28 de septiembre de 2010

HISTORIA DEL ESTOICISMO

Qué tienen de "cristiano" los filósofos griegos?
Pese a que suela tratarse como muy diferenciada la antiga filosofía griega y los dogmas de la patrística, la verdad es que, mientras algunos helenos preludian claramente algunos aspectos cristianos (sin duda), otros están muy contrapuestos a la fe de Yahvé; no obstante, ningún autor de la época de Tales se podría tratar como claramente cristiano. Comentemos las similitues de los siguientes autores con el cristianismo: "de más a menos cristiano", Platón, Aristóteles, Parménides, los estoicos, Heráclito, Epicuro y los escépticos (sin hacer un análisis exhaustivo). Platón fué sin duda el autor más utilizado por la patrística (sobretodo por San Agustín). Hay que decir que Platón a veces era conocido, no directamente, sino a través de autores que lo trataron, como Filón de Alejandría. Tanto Platón como Jesús creían (oponiéndose a Aristóteles) que el alma immaterial, al morir el cuerpo, se separa de él. El eros platónico fué adaptado al cristianismo por San Agustín. El socrático mayor escribió: "Los dioses no necesitan nada de los hombres; los rezos no mejoran a la divinidad", tambien sin contraposición con los Padres de la Iglesia. Aristóteles fué un autor muy utilizado por la escolástica (Tomás de Aquino), aunque no coincidía con el cristianismo en algunos puntos. Por ejemplo, para Aristóteles el alma era mortal, el mundo era eterno y las verdades no provenían de dios (para Aristóteles existía un "entendimiento agente" que permitía captar las formas y la existencia de los objetos). Para hacer a Aristóteles menos dañino al cristianismo, se asimiló el motor immóbil a dios, se comparó el movimiento del motor immóbil con la creación, y se dijo que el alma (esencia) sigue existiendo tras la muerte del cuerpo, pero que sólo existe como potencial, hasta que se vuelve a encarnar en un cuerpo (existencia) y se vuelve actual. La adaptación cristiana del aristotelismo, como se ve, tiene su encanto pero suena a apañada. Parménides, aunque autor poco utilizado explícitamente por los cristianos, ha sido una arma eficaz contra el agnosticismo-ateismo de la sofística e inspiración del neoplatonismo (el Uno de Parménides cae muy cerca del Uno de Plotino, aunque este último está mucho más elaborado). Un detalle importante es que Parménides jamás califica explícitamente a su Ser trascendente como divino; esto es algo que harán otros pensadores. Sigamos. Los estoicos, desde luego, creían en dios, aunque a su manera y lejos de los dogmas de Zeus y el Olimpo. El fuego-Logos, las semillas de razón, el fatalismo (paralelo a las teorías milenaristas) y el innatismo, entre otros, son argumentos muy utilizados por los primeros cristianos (algunas veces con clara influencia estoica). Ya es menos claro el "carácter cristianófilo" de Heráclito. El filósofo del devenir, desde luego, creía que el mundo era una construcción racional y no una creación divina. Pero Heráclito creía que el universo sigue una ley poderosa e ininfringible, el Logos, y precisamente los patrísticos creyeron que este logos era una voluntad divina. Muy poco de esto se halla ya en Epicuro. Este hedonista (uno de mis filósofos favoritos) no cree ni en la providencia ni en la immortalidad del alma, y creía más en el sentimiento de amistad que en la religión. Para Epicuro todo era o átomos simples o construcciones de átomo y vacío: incluso los dioses y el alma son átomos.

1 comentario:

  1. BREVE CRÍTICA AL PROFETISMO JUDÍO DEL ANTIGUO TESTAMENTO: La relación entre la fe y la razón expuesta parabolicamente por Cristo al ciego de nacimiento (Juan IX, 39), nos enseña la necesidad del raciocinio para hacer juicio justo de nuestras creencias, a fin de disolver las falsas certezas de la fe que nos hacen ciegos a la verdad mediante el discernimiento de los textos bíblicos. Lo cual nos exige criticar el profetismo judío o revelación para indagar “si es verdad o es mentira” que los textos bíblicos son palabra de Dios. Enmarcado la crítica en el fenómeno espiritual de la trasformación humana y, las ciencias y técnicas que nos ayudan a desarrollarnos espiritualmente. Abordados por la doctrina y la teoría de la trascendencia humana, conceptualizadas por los filósofos griegos y los místicos hindúes. Sabiduría védica instruida por Buda e ilustrada por Cristo, la cual concuerda con los planteamientos de la filosofía clásica y moderna, y las respuestas que la ciencia ha dado a los planteamientos trascendentales: (psicología, psicoterapia, logoterápia, desarrollo humano, etc.). Utilizando los principios universales del saber filosófico y espiritual como tabla rasa, a fin de deslindar y hacer objetivo lo “que es” o “no es” del mundo del espíritu. Método o criterio que nos ayuda a discernir objetivamente __la verdad o el error en los textos bíblicos analizando los diferentes aspectos y características que integran la triada preteológica: (la fenomenología, la explicación y la aplicación, del encuentro cercano escritos en los textos bíblicos). Vg: la conducta de los profetas mayores (Abraham y Moisés), no es la conducta de los místicos; la directriz del pensamiento de Abraham, es el deseo intenso de llegar a tener una descendencia numerosísima y llegar a ser un país rico como el de Ur, deseo intenso y obsesivo que es opuesto al despego de las cosas materiales que orienta a los místicos; es por ello, que la respuestas del dios de Abraham son alucinaciones contestatarias de los deseos del patriarca, y no tienen nada que ver con el mundo del espíritu. La directriz del pensamiento de Moisés, es la existencia de Israel entre la naciones a fin de llegar a ser la principal de todas, que es opuesta a la directriz de vida eterna o existencia después de la vida que orienta el pensamiento místico (Vg: la moradas celestiales, la salvación o perdición eterna a causa del bien o mal de nuestras obras en el juicio final de nuestra vida terrenal, abordadas por Cristo); el encuentro cercano descrito por Moisés en la zarza ardiente describe el fuego fatuo; el pie del rayo que pasa por el altar erigido por Moisés en el Monte Horeb, describe un fenómeno meteorológico; el pacto del Sinaí o mito fundacional de Israel como nación entre las naciones por voluntad divina a fin de santificar sus ancestros, su pueblo, su territorio, Jerusalén, el templo y la Torah; descripciones que no corresponden al encuentro cercano expresado por Cristo al experimentar la común unión: “El Padre y Yo, somos una misma cosa”, la cual coincide con la descrita por los místicos iluminados. Las leyes de la guerra dictadas por Moisés en el Deuteronomio causales del despojo, exterminio y sometimiento de las doce tribus cananeas y del actual genocidio del pueblo palestino, hacen evidente la ideología racista, criminal y genocida serial que sigue el pueblo judío desde tiempos bíblicos hasta hoy en día, conducta opuesta a la doctrina de la no violencia enseñada por Cristo __ Discernimiento que nos aporta las suficientes pruebas objetivas de juicio que nos dan la certeza que el profetismo judío o revelación bíblica, es un semillero del mal OPUESTO A LAS ENSEÑANZAS DE CRISTO, ya que en lugar de sanar y prevenir las enfermedades del alma para desarrollarnos espiritualmente, enerva a sus seguidores provocándoles: alucinaciones, estulticia, delirios, histeria y paranoia; propiciando la bibliolatría, el fanatismo, la intolerancia, el puritanismo hipócrita, el sectarismo, e impidiendo su desarrollo espiritual.

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